Tras situar la Biblia de Ferrara en el contexto de las traducciones bíblicas de su época, analiza pormenorizadamente el himno de David incluido en II Samuel 22 y repetido en el Salmo 18, teniendo en cuenta los siguientes testimonios, además del de Ferrara: las biblias escurialenses I.1.8 y I.1.6 (del siglo XIII), I.1.4 (del siglo XV), las I.1.3, I.1.5 y I.1.7 (traducidas del hebreo), la segunda y tercera partes de la General Estoria, la Summa de Nicolás de Lira, la Biblia de Alba, la traducción de Evora CXIV y la Vulgata según la versión de la Biblia de París. Atiende a los siguientes aspectos: métrica y ritmo, grafía y fonética, morfosintaxis, léxico, estilo, labor interpretativa, la calidad de la Biblia de Ferrara. Concluye con una amplia bibliografía.